Posted: 7/1/2019
No hay pirotecnia inofensiva, advierte el personal de la Unidad de Quemados de Parkland
El verano es sinónimo de fiestas en la piscina, parrilladas en el patio, reuniones familiares y pirotecnia. Pero si usted no es cuidadoso, las celebraciones pueden terminar rápidamente en visitas a las salas de emergencias.
En el 2017, las cifras más recientes que están disponibles, al menos ocho personas murieron y alrededor de 12,900 sufrieron heridas lo suficientemente graves como para requerir tratamiento médico después de los incidentes relacionados con la pirotecnia, según la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de los Estados Unidos. Mientras que la mayoría de estos incidentes fueron consecuencia de aficionados que trataron de utilizar pirotecnia o explosivos de categoría profesional, caseros u otros ilegales, miles fueron consecuencia de artefactos menos poderosos, como pequeños petardos y luces de bengala.
La pirotecnia inicia un promedio de 18,500 incendios por año, incluidos 1,300 incendios de estructuras, 300 incendios de vehículos y 16,900 en el exterior, además de otros incendios, según la Asociación Nacional de Protección contra Incendios (National Fire Protection Association, NFPA). Estos incendios causaron un promedio de tres muertes, heridas en 40 civiles y un promedio de $43 millones en daños directos a la propiedad.
En los últimos cinco años, 40 pacientes fueron hospitalizados en la Unidad de Quemados de Parkland Health & Hospital System, debido a quemaduras causadas por el uso de pirotecnia. Unos pocos casos fueron de niños pequeños que recibieron un impacto accidental cuando un adulto perdió el control de la pirotecnia o cuando esta explotó de repente. Algunas de las lesiones fueron tan graves que exigieron hospitalización, injertos cutáneos y rehabilitación.
“Por lo general, las partes del cuerpo que resultan afectadas por quemaduras a causa de la pirotecnia son las manos, la cara, los brazos y el pecho,” señaló Stephanie Campbell, RN, MS, CCRN-K, directora del programa de quemados de la Unidad Regional de Quemados de Parkland. “Los fuegos artificiales pueden ser peligrosos, y todos deben recordar que pueden ocasionar heridas graves e incluso mortales.”
Incluso cuando parecen no ser tan peligrosas como la pirotecnia que ilumina el cielo nocturno, las luces de bengala alcanzan suficiente temperatura (1200 grados Fahrenheit) como para ocasionar quemaduras de tercer grado. En comparación, el agua hierve a 212 °F, los pasteles se hornean a 350 °F y el vidrio se funde a 900 °F.
“La gente no se da cuenta de cuánto se pueden calentar las luces de bengala y de lo peligrosas que pueden ser para los niños, incluso bajo supervisión,” dijo Campbell. “En tan solo un segundo, una luz de bengala se puede caer en un pie o se la puede rozar contra la ropa de alguien más. Frecuentemente, los padres nos cuentan que, aunque ellos estaban con el niño, el incidente sucedió demasiado rápido como para evitar la quemadura.”
Si es legal comprar pirotecnia donde usted vive y decide utilizarla, la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de los Estados Unidos y la NFPA recomiendan prestar atención a los siguientes consejos de seguridad:
• Nunca use pirotecnia bajo el efecto de las drogas o el alcohol
• Nunca permita que los niños pequeños manipulen la pirotecnia
• Los niños mayores deberían usarla solo bajo estrecha supervisión de un adulto
• Toda persona que use pirotecnia o se encuentre cerca debería utilizar gafas de protección
• Nunca la encienda en interiores
• Solo úsela lejos de la gente, las casas y de material inflamable
• Encienda solo un artefacto a la vez y mantenga una distancia prudencial después de encenderlo
• Nunca encienda los artefactos dentro de un contenedor
• No trate de volver a encender o de manipular la pirotecnia defectuosa
• Antes de descartarla, remoje en agua, durante unas horas, la pirotecnia no utilizada
• Mantenga cerca una cubeta con agua para extinguir por completo la pirotecnia que no se apague, o en caso de incendio
Ante una quemadura, Campbell aconseja aplicar agua fresca (no fría) en la zona para frenar el proceso de quemado, quitar prendas y joyas del área lastimada, cubrirla con una sábana seca y limpia o aplicar vendajes no muy apretados, y buscar atención médica.
“La conclusión es que la pirotecnia puede ocasionar heridas que cambian la vida,” agregó Campbell. “Si desea ver una exhibición de pirotecnia, reúnase con su familia y sus amigos, encuentre un lugar agradable para extender su manta y relajarse, y deje el espectáculo en manos de los profesionales.”
Establecido en 1962, el Centro Regional de Quemados de Parkland brinda atención a más de 1,800 pacientes por año. Esta unidad integral de quemados, que proporciona servicios al norte de Texas y sus alrededores, es uno de los apenas 73 centros de quemados verificados en América del Norte y el único en el norte de Texas, y ofrece todos los servicios desde el tratamiento de emergencia hasta los cuidados intensivos, rehabilitación y atención de seguimiento ambulatoria.
Para obtener más información sobre los servicios disponibles en Parkland, visite www.parklandhospital.com