Posted: 10/25/2017
La Policía de Parkland ofrece consejos para mantenerse seguro
Halloween puede ser una noche aterradora, con calles llenas de zombis, jinetes sin cabeza y encuentros espeluznantes. Pero lo más aterrador son los accidentes de tránsito fatales que protagonizan conductores ebrios. Y según datos, estos accidentes ocurren con tres veces más frecuencia en Halloween que en la víspera de Año Nuevo.
Las estadísticas de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA por sus siglas en Inglés,) muestran que en las noches de Halloween entre el 2009 y el 2013, el 43 por ciento de las muertes por accidentes automovilísticos implicaron a conductores ebrios. Las últimas estadísticas disponibles son las del año 2013, donde el 26 por ciento de las fatalidades de peatones en Halloween tuvieron fueron a causa de conductores ebrios.
Además, es probable que estas cifras aumenten si la festividad cae en los fines de semana. Este año, el día macabro cae un martes, noche de escuela.
El hecho de saber que es noche de escuela quizás sea el truco necesario para mantener a los fantasmas y duendes a salvo, según explican agentes del departamento de policía de Dallas County Hospital District, DCHD por sus siglas en Inglés.
“Las luces deben apagarse a las 9:00 p. m., no solo por razones de seguridad, sino porque, además, animará a los niños a volver a sus casas,” explicó el sargento Robert Johnson, coordinador de Prevención de crimen en DCHD. “La seguridad debe ser una prioridad para todos.”
El sargento Johnson explicó que los conductores deben estar alertas especialmente en “zonas escolares” en los vecindarios, ya que es ahí donde los niños salen a buscar dulces en Halloween. Los jóvenes entusiasmados podrían correr entre vehículos estacionados; por eso es importante mantener la velocidad en 20 millas por hora o menos cuando se conduce por vecindarios.
“También se debe considerar tener las ventanas bajas,” dijo el sargento Johnson. “Con frecuencia uno oye algo antes de verlo. Preste atención a los niños que estén jugando o a los que puedan estar en problemas. Y esté atento a lo que le parezca que no está bien. Si ve algo, diga algo.”
Esto incluye llamar al 911 e informar la presencia de vehículos que zigzaguean entre el tránsito, que van a mucha velocidad, o casos en los que cree que el conductor no puede conducir. “Con tantas personas en la calle durante esas horas pico de Halloween, su llamada telefónica puede salvar una vida,” explicó.
El sargento Johnson también advirtió que los padres y adultos deben examinar los dulces antes de que los consuman. Si usted o algún ser querido consumen un dulce que le parece dudoso, el personal del centro de intoxicaciones North Texas Poison Center (en inglés, NTPC,) en Parkland, está preparado para responder cualquier pregunta acerca de intoxicaciones en su línea directa sin cargo; simplemente llame al 1-800-222-1222.
El año pasado, los especialistas en intoxicaciones recibieron 4,591 llamadas entre el 27 de octubre y el 2 de noviembre. De esas llamadas, 3,377 estuvieron relacionadas con la exposición a distintas sustancias, y 1,161 fueron para consultar información. En el 2016, el NTPC recibió 72,074 llamadas. El personal evaluó, atendió y monitoreó más de 52,268 pacientes intoxicados, de los cales el 68 por ciento fueron atendidos a domicilio.
Para obtener más información sobre los servicios disponibles en Parkland, visite www.parklandhospital.org